Una familia del sector de potrero grande en la precordillera de Curicó, decidió enterrar tres millones de pesos que había ahorrado con mucho esfuerzo. Sin embargo, las intensas lluvias recién pasadas inundaron el lugar donde estaba enterrada la plata y gran parte se destruyó.
Pero no está todo perdido ya que el banco central informó que los billetes que puedan estar parcialmente destruidos pueden ser canjeados por nuevos billetes.